Este ensayo discute el acercamiento de dos biólogos, actuando como profesores en el campo de la enseñanza de la ciencia y la biología, al campo de los estudios acerca de la animalidad, entendido aquí no solo en el sentido de problematizar la centralidad de los animales en sus relaciones con nosotros - los animales humanos - , pero, sobre todo, en el sentido de enfatizar que la forma en que tratamos a los animales expone múltiples capas de problematización sobre la forma en que tratamos a otros humanos. En este sentido, parte de las discusiones que propone este campo de estudios se ocupa precisamente de esto, con el otro en la relación de los animales humanos entre sí y, especialmente, de estos con los animales no humanos, buscando tensar las distintas jerarquías constituidas. En esta primera aproximación, hacemos más preguntas y yuxtaposiciones con el campo de la biología, la ciencia y la enseñanza de la biología, con el cuerpo (humano y animal) y también con la biopolítica y la necropolítica que las respuestas, aunque sean provisionales. Esto, con el fin de trazar un posible camino teórico-metodológico que nos permita, en los próximos pasos, incorporar el tema de la animalidad en la formación de los profesores de ciencias y biología y, quizás, mapear algunos de sus efectos. El texto Una aglomeración inquieta: prisioneros, animales, solicitantes de asilo y embalajes poshumanos, de Jane Bone y Mindy Blaise (2015) se presenta de manera más extensa con el fin de establecer algunos puntos posibles para tal enfoque. Con base en esto, trazamos algunas posibles tensiones en el contexto sociopolítico brasileño actual.